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  • Foto del escritorDavid Cala

Operación JB

Este artículo sobre Operación JB (Matraca Ediciones) se publicó originalmente en el número 8 de La Cabina de Nemo.


Operación JB, no tiene nada que ver con una marca de whisky, es el acrónimo de Joseph Berna y es una publicación de la editorial Matraca. Comentar que en un principio se iba a llamar Operación Matraca, pero se le decidió cambiar el nombre a raíz del fallecimiento, a principios de este año, del mencionado Joseph. Para quien no conozca esta editorial sevillana a estas alturas, se centra en rescatar bolsilibros o novelas de a duro, incluso en publicar otras que quedaron inéditas de algunos autores, en especial Curtis Garland y el recientemente fallecido Joseph Berna, a quien homenajean con esta publicación. Aunque también está publicando a autores actuales, pero siempre en formato bolsilibro, como Sergio Salvador Campos, David Piulé, Tamara López o Tony Jiménez, entre otros.

Mención especial para David Piulé, porque no solo ha colaborado en esta publicación y en algunas otras de Matraca con relatos cortos, sino que tiene publicado un bolsilibro titulado Fisura en el tiempo, con Matraca por supuesto. No contento con ello, es el autor de las bandas sonaras de todas las publicaciones de Matraca, incluida la del homenaje a Joseph Berna. Además, acaba de componer también la banda sonora para esta revista que tienes entre tus manos.

Operación JB, posiblemente, es la publicación más loca y divertida de los últimos tiempos. Imaginaros un cadáver exquisito, en el que cada autor escribe un capítulo de una novela y solo conoce lo que han escrito sus predecesores, cada locura de un escritor tiene que ser continuada por el siguiente hasta llegar a un desenlace que ha tenido que escribir el editor de Matraca, Pepe Cueto. Conforme la historia avanza, más complicado se hace escribir el siguiente capítulo sin perder el hilo de las pruebas que te han puesto los anteriores escritores, no me quiero ni imaginar cómo habrá cerrado la historia Pepe Cueto, (solo leí lo anterior a lo escrito por mí, quería mantener la incertidumbre del resto de la historia hasta tener el bolsilibro físico entre mis manos).

Dieciocho escritores (Gabriel Díaz Barragán, Alex M. Saponi, Belén A. García, David Piulé, Adolfo Quibus, David Cala, Raúl Cordero, Tamara López, Tony Jiménez, Pablo Dobrinin, Sergio Salvador Campos, José Antonio Herrera, Pako Mulero Arenillas, Ramón Charlo, Andrés Peláez Paz, Álvaro Huerta C., José Luis Forte y Pepe Cueto), cada uno con sus filias y sus fobias, dispuesto a crear una historia a treinta y seis manos, que se dice pronto. Muchos de ellos con obras publicadas en Matraca, y otros a punto de publicarlas, el prólogo de Pepe Cueto me parece maravilloso para conocer algo más de cada uno de los autores.

Para completar la apuesta arriesgada, el número de ilustradores para los diferentes capítulos asciende a catorce, cada uno con su estilo concreto (Juan Kalvellido, Elena González Morillo, Gabriel Díaz Barragán, César Bolinaga Galeote, Pepe Cueto, Rebote, Pablo Portillo, Cristina J. Rodríguez Zayas, Joseph Bervy, Nicolás Martínez Cerezo, Fernando Lorente, Ana R. Quía, David Piulé y Elsa Clauss). Aportando un resumen visual de cada capítulo con sus ilustraciones.

Cuando Pepe Cueto me escribió para comentarme lo que se estaba gestando e invitarme a colaborar escribiendo uno de los capítulos, el sexto en concreto, lo primero que pensé fue: este hombre está loco, no puede salir bien. Pero como yo también estoy loco, no me lo pensé mucho, y por supuesto, le dije que sí, que estaba dispuesto a enfrentarme a esa prueba, y creo que no salió mal del todo, a pesar de no ser el género donde más cómodo me encuentro escribiendo. De hecho estoy muy contento de haber colaborado con esta iniciativa.

Estoy convencido de que es un homenaje súper sentido por parte de todos los que hemos aportado nuestro granito de arena a esta obra, algunos amigos íntimos del maestro Berna, otros simples admiradores de su obra, incluso su hijo aporta una ilustración, pero todos convencidos de que su partida dejó un hueco en los corazones de los Bernadictos Unidos.

Os dejo.

Me voy a leer Operación JB.

Acompañado por un buen whisky.




Os dejo los enlaces a la pagina de Matraca Ediciones, de Operación JB y de la banda sonora de Homenaje a Joseph Berna.



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